Investigadores del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (Idibell) han identificado un receptor clave en los casos de cáncer de ovario con metástasis, lo que abre la puerta a usar la inhibición del mismo como diana terapéutica.

En un comunicado, el centro ha detallado que el hallazgo de los investigadores del grupo de señalización molecular en cáncer del programa Oncobell del Idibell se ha publicado en 'Molecular Cancer Therapeutics'.

Concretamente, se ha asociado la expresión del receptor CXCR4 -implicado en el movimiento de las células en la sangre- a la potencial diseminación de las células tumorales a través del torrente sanguíneo.

A partir de esta constatación los investigadores demostraron en estudios en modelos ortotópicos que la administración de inhibidores de CXCR4 en aquellos cánceres donde previamente se había detectado la expresión elevada de este receptor, impedía en gran medida la propagación de las células tumorales a nivel sanguíneo y dentro del peritoneo.

Paralelamente, también han observado que la eliminación genética de CXCR4 en cultivo celular da lugar a tumores de crecimiento más lento y más bajo porcentaje de diseminación. El diagnóstico del cáncer de ovario se suele hacer tarde y en el 80 % de los casos los pacientes ya presentan metástasis o diseminaciones peritoneales que pueden afectar a otros órganos vitales como el estómago, el riñón y el pulmón, entre otros.

Por otra parte, si bien es cierto que la combinación de cirugía y quimioterapia con derivados del platino funciona muy bien, el porcentaje de recurrencia de la enfermedad a los dos años es del 70 %.

Los investigadores consideran que el estudio de cómo las células tumorales diseminan es básico de cara a entender y mejorar el pronóstico de la enfermedad. Así, su línea de investigación se centra en identificar las moléculas implicadas en esta diseminación, que suele ir acompañada de una acumulación de líquido en la zona del peritoneo (ascitis), y se termina propagando a nivel de torrente sanguíneo.

"Si identificamos los factores que impulsan el movimiento de las células tumorales en estas zonas, podemos intentar bloquearlos para minimizar las posibilidades de metástasis", ha señalado la primera autora del estudio, la Doctora Agnès Figueras.