La templanza y tranquilidad de una sanitaria argentina han salvado la vida a un bebé de solo 17 días. Sus padres, en estado de shock, lo llevaron con claros síntomas de ahogamiento al centro de emergencias en el que ella trabaja como técnico sanitario en urgencias.

Las imágenes de la cámara de seguridad captaron cómo se obró el milagro: los padres dejaron la furgoneta tirada y entraron corriendo al puesto de emergencias con el bebé en brazos. Allí gritaban pidiendo ayuda.

Alma les abrió la puerta y sin dudar agarró al pequeño, lo colocó y comenzó con la maniobra para salvarle. Masaje en la espalda y golpes secos con mucho cuidado hasta que el pequeño Marcos, escupe la flema que le estaba ahogando.

"No puedo decirles que no puedo hacerlo, les dije sí, Marcos va a vivir, voy a realizar las maniobras", explica Alma. Y Así lo hizo: apenas dos minutos después el pequeño recuperó su color y respiraba con normalidad en brazos de Alma, que no dejaba de acunarle y soplarle.

También tranquilizaron a sus padres, aún en shock y sin poder creer que el pequeño casi muere. Se atragantó mientras lo amamantaban. Pasados unos minutos llegó la ambulancia para trasladarlo al hospital de Mar de Plata. Ya tras el alta, emocionados, han vuelto a darle las gracias a su salvadora.