La presencia de alumnas en los cursos de ingeniería es llamativamente escasa. Son pocas las mujeres que comienzan sus estudios en este sector, algo que Laura ya notó incluso antes de llegar a la universidad: "Yo estudié un bachillerato de ciencias y ya éramos muy pocas chicas", ha comentado la joven a laSexta.

Durante la pandemia, su curiosidad la llevó a aprender a programar y entonces, ha explicado, supo que quería dedicarse "a algo de ordenadores". No obstante, llegó a la facultad sin mucha información. Sabía poco más que que se desarrollaban apps o páginas web, y tampoco tenía referentes en los que sentirse reflejada: "Conoces a los grandes, pero todos son hombres", ha comentado.

Esto provoca, tal y como ha indicado la coordinadora del doble grado en Matemática Computacional y Ingeniería de Software, Mar Angulo, que "algunas piensen que para manejar dispositivos o tecnología tienen menos capacidad". Algo, ha recordado, que "está muy lejos de la realidad que vivimos aquí cada día".

Formar nuevas profesionales en este campo es clave para el futuro, y así lo explica la doctora: "Las ciencias, con el avance de la tecnología de una manera muy especial, están en la base de la respuesta a cualquier problema que tenemos como sociedad".

Sin embargo, a pesar de los avances, la presencia de la mujer en estas áreas sigue siendo muy escasa: "Un desequilibrio hoy en las carreras STEM se traduce en un desequilibrio futuro en los puestos de dirección y decisión", ha apuntado Angulo.

Un ejemplo es Claudia Reyero. Es la única alumna en su clase de Matemáticas e Ingeniería y será la única mujer que se gradúe este año en esa carrera. "Lo que me da ha dado rabia es cuando me he dado cuenta de que no es lo que yo pensaba. A mí me gusta la ingeniería y la ingeniería necesita chicas, necesita también esas mentes sensibles", ha expresado.

Mientras estudia, colabora en varios proyectos científicos. Ella ya es un referente para futuras generaciones: "Ojalá no tener que serlo, pero si es lo que hace falta para que haya más chicas, no me importa". Piden acabar con los estereotipos para que ya desde las aulas se fijen las bases de un futuro más igualitario.