España se alejará de los récords en turismo de años anteriores, según el Consejo General de Economistas (CGE), que cita como principales amenazas del turismo a la recuperación de mercados alternativos, la fortaleza del euro y la debilidad de Reino Unido.

Por ello, antes de que comience a disminuir la cifra de visitantes considera que debería intentar compensarse aumentando la calidad y, en tal sentido, el mayor gasto por turista.

El turismo aportó 172.900 millones al PIB español en 2017, un 5,7% más. El 'lobby' mundial del turismo, el Consejo Mundial de Viaje y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), prevé que la contribución total del turismo al PIB español aumente un 2,9% este año y un 2,3% de media anual hasta 2028.

Las estimaciones que maneja el Gobierno es que se superen los 23 millones de turistas internacionales en el segundo trimestre del año (abril, mayo y junio) con un gasto asociado estimado de 23.500 millones de euros. De confirmarse esta tendencia, supondría un aumento en torno al 2,2% en la llegada de visitantes del exterior muy por debajo al incremento del 12,5% registrado en ese periodo en 2017 y un repunte del 4,4% del gasto asociado frente al repunte del 15,3% del segundo trimestre del pasado año.

Según el informe 'España: un 'boom' del turismo que se desvanece', elaborado por la entidad USB, la contribución del sector turístico al PIB español pasará de un 3,2% a un 2,7% en 2018, ligeramente por encima de la economía en general, debido a la recuperación de los países competidores del Mediterráneo y a la moderación en el gasto por parte de los turistas.

En su análisis la entidad suiza se indica que el resurgimiento de destinos como Túnez, Egipto y Turquía está ralentizando el crecimiento del turismo en España, tanto por un descenso en la llegada de turistas y como por unos menores ingresos que el pasado verano ya comenzaron a percibirse.

En cuanto al Brexit, señala que por el momento no ha tenido un impacto significativo, ya que los británicos suponen un 23% de los visitantes que recibe España y un 21% de los ingresos turísticos.

Como resultado del menor crecimiento, la contribución del turismo extranjero al PIB pasará del 0,4% en 2016 y en 2017 a un 0,1% en este ejercicio. Dado el papel multiplicador del sector, este descenso es probable que lastre la creación de empleo y los ingresos de los hogares, claves para que la economía española.

A pesar de ello, UBS pronostica que el turismo continuará tirando de los precios inmobiliarios en las principales zonas turísticas y en el centro de las grandes ciudades. Este impulso, aunque menor que otros ejercicios, contrasta con la situación de ajuste del mercado residencial que se observa en el resto del país.

La entidad suiza también apunta que el 'boom' turístico ha acentuado la recuperación desigual del mercado inmobiliario, en donde sigue existiendo un gran stock por absorber en la periferia de las ciudades, zonas del interior y rurales, así como ubicaciones secundarias de costa.