El hombre de 56 años que mató el pasado miércoles a su sobrino de 29 de un disparo en la cabeza en una vivienda de la localidad de Mejorada del Campo ha sido detenido tras entregarse en la mañana de este viernes en los Juzgados de Tarragona, han informado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil.

Tras comprobar su identidad, los Mossos d'Esquadra le han detenido por un delito de homicidio doloso con arma de fuego en virtud de la orden de búsqueda y captura que había emitido la Guardia Civil, han agregado fuentes policiales.

Está previsto que el arrestado sea trasladado a las dependencias del instituto armado en Madrid la mañana de este sábado, tras lo que, si no hay novedades, deberá pasar a disposición judicial.

Durante la tarde del viernes los agentes han inspeccionado el vehículo en el que el arrestado se desplazó hasta Tarragona, donde han encontrado una escopeta, que ha sido trasladada a las dependencias del Cuerpo en la ciudad catalana. Posteriormente será remitida a los agentes de criminalística, que determinarán si es la misma arma de fuego con la que presuntamente cometió el homicidio.

La Guardia Civil estaba hasta ahora centrando la búsqueda en las zonas cercanas a Madrid de las provincias de Guadalajara y Toledo, ya que el presunto asesino tenía una vivienda en la localidad de Lucillos y conocía esas zonas. Viajaba en un coche de su propiedad y con la escopeta.

Los investigadores insisten en la hipótesis de un conflicto familiar. El detonante fue una discusión entre el fugado, Jesús, y su madre, una persona ya mayor, el miércoles a mediodía. En dicha discusión mediaría la nieta de la anciana y hermana de la víctima, que recibió amenazas y un empujón del presunto asesino. Le denunció poco después en el cuartel de la Guardia Civil por lesiones leves.

En un posible acto de venganza, Jesús P.S. habría esperado con la escopeta cargada a su sobrino Sergio, en el que convivía en esa casa de Mejorada. Así, cuando llegó a última hora de la tarde a la casa, sin mediar palabra, le habría disparado a quemarropa a la entrada de la casa, ya que había sangre en el portal y en la escaleras y el joven llevaba la mochila puesta cuando le atendieron los sanitarios.

A su llegada, los facultativos del Summa 112 solo pudieron confirmar la muerte de Sergio en ese edificio de la calle Greco 11 de Mejorada. Luego llegó la Guardia Civil, que acordonó la zona y se preparó por si se había refugiado en el lugar. Pero poco después comprobaron que había huido con el coche y la escopeta.

Con algún 'pero'

La Justicia ratifica que llamar "gilipollas" a un jefe no es motivo de despido

Así lo ha ratificado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). Eso sí, enfatiza que el insulto debe ser "concreto y aislado" en un contexto determinado, como el caso de un empleado al que le pidieron que se quedara a una reunión al terminar su turno.