La vicepresidenta y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, Carmen Calvo, no ha descartado que el Gobierno conceda un estatus especial a los 60 inmigrantes y refugiados que están a bordo del Aquarius y que España se ha comprometido a recibir, al tiempo que ha asegurado que la comunidad autónoma de Cataluña está dispuesta a acogerles.

"Vienen con las condiciones con las que les podamos traer a nuestro país, a diferencia de quienes no vienen traídos por nosotros", ha dicho Calvo en una rueda de prensa en Córdoba, en la que ha explicado el acuerdo europeo al que han llegado seis países de la UE para dar una solución a los 141 pasajeros del Aquarius.

Fuentes de Vicepresidencia han señalado que el procedimiento de la acogida y el estatus que se dará a los pasajeros "se está diseñando" y "estipulando" en el marco del acuerdo cerrado entre seis países europeos.

Así pues, en su comparecencia la vicepresidenta no ha concretado si los migrantes recibirán un estatus especial, como lo tuvieron los 629 migrantes rescatados por este mismo buque hace dos meses y que desembarcaron en el puerto de Valencia después de que España le ofreciese puerto seguro. En esa ocasión, se les concedió un permiso de entrada de 45 días por "razones humanitarias".

Según ha explicado, el buque no tiene "la situación critica" que tenía entonces, "con una sobrecarga de 600 personas". "Podía haberse hundido y la decisión fue para evitar una tragedia", ha argumentado sobre la decisión de autorizar el desembarco en puerto español.

Para Calvo, el estado del barco actualmente no es igual, y por ello desembarcará el Malta, en La Veleta, porque "está abierto" y está "más cerca" del buque. "Se ha podido abrir un puerto cercano", ha manifestado, teniendo en cuenta que el pasado mes de junio Malta e Italia rechazaron la entrada del Aquarius en su territorio.