Dos crías de jabalí han paseado más de dos horas por la transitada Avenida Meridiana de Barcelona, en las inmediaciones de la estación de Renfe y Metro de La Sagrera. Esta situación, no tan inusual en la Ciudad Condal, ha obligado a las autoridades a activar los protocolos de seguridad, procediendo a su captura y posterior eutanasia.

Algunos transeúntes han explicado que los jabatos pululaban nerviosos y asustados por la acera, lado de montaña, de la Meridiana y que la gente se iba apartando a su paso. Esto pone en riesgo la circulación, ya que los siniestros de tráfico provocados por animales están en auge. Por ello, los agentes de la Guardia Urbana han hecho que los animales cruzaran la Meridiana hasta la plaza de Jardines de Elche y los han acabado capturando en la calle Garcilaso.

Fuentes del Ayuntamiento de Barcelona han explicado a EFE que la Guardia Urbana ha recibido el aviso pasadas las 7.30 horas y, como marca el protocolo, se ha activado el Servicio de Ecopatología de la Fauna Salvaje (SEFAS).

"Los jabalíes, dos ejemplares, han sido capturados por los servicios veterinarios pasadas las 9:30 en la calle Garcilaso. Los han dormido con dardo, les han practicado la eutanasia y los han llevado a la UAB (Veterinarias), donde se hacen necropsias para determinar características, etcétera", han explicado las mismas fuentes.

Los jabalíes metropolitanos presentan un riesgo para la salud

El aumento de la población de jabalíes en Barcelona representa un riesgo para la salud de sus habitantes. Un estudio del Servicio de Ecopatología y Fauna Salvaje de la Universidad Autónoma de Barcelona y del IRTA (Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria), publicado en 22 de enero del 2022, revela que los jabalíes metropolitanos son portadores de 'Campylobacter' y, en menor medida, de 'Salmonella' resistentes a, como mínimo, un tipo de antibiótico.

Este análisis sugiere que la transmisión puede ser de humanos a jabalíes y que, por tanto, las bacterias circulan entre los ambientes silvestres, domésticos y humanos. Los autores consideran necesario profundizar en la gestión de la fauna silvestre desde el punto de vista epidemiológico para reducir los riesgos para la salud pública.