La Policía antiterrorista británica está investigando el ataque perpetrado por un hombre armado con un cuchillo de cocina en la estación de tren Victoria en Manchester en el que resultaron heridas tres personas, entre ellas un agente, en Nochevieja.

La Policía de Gran Manchester ha señalado que mantiene abiertas todas las opciones respecto al motivo detrás del ataque, si bien ha indicado que no había información de Inteligencia que sugiera una amenaza más amplia.

Un testigo, un productor de la BBC que estaba en la estación, ha contado que el hombre estaba armado con un gran cuchillo de cocina y dijo que actuaba por los "bombardeos en otros países".

El sospechoso ha sido detenido "en unos minutos", según la Policía, y está siendo interrogado bajo custodia.

Los heridos, una mujer y un hombre de unos 50 años, se encuentran en estado grave pero su vida no corre peligro, según la Policía.

Un agente de unos 30 años también ha recibido una puñalada en el hombro pero ya ha sido dado de alta a primera hora de la mañana del martes.

"Los acontecimientos de esta noche habrán preocupado comprensiblemente a la población pero tengo que subrayar que el incidente no sigue en curso, hay un hombre bajo custodia y actualmente no hay información de Inteligencia que sugiera una amenaza más amplia en estos momentos", ha asegurado el comisario jefe adjunto, Rob Potts, en un comunicado.

Testigos del suceso, que se produjo minutos antes de las 21.00 GMT en la céntrica estación de Victoria, aseguran que el atacante gritó consignas islamistas, si bien las fuerzas de seguridad destacaron que mantienen la "mente abierta" sobre las motivaciones del ataque.

La unidad antiterrorista de la Policía registró la tarde del martes el domicilio donde creen que vive el sospechoso, una casa adosada en Cheetham Hill, en el norte de la ciudad inglesa.

Una vecina de la vivienda que ha sido registrada, Nousha Babaakachel, de 40 años, dijo a los medios que en la casa vive un matrimonio de origen somalí que tiene cuatro hijos y una hija. Esa vecina relató que la familia llegó a Londres hace unos doce años procedente de Holanda, y que dos de los hijos estudian en la universidad, uno trabaja en el aeropuerto de Manchester y otro regresó a Somalia.

La Policía ha informado de que intensificará su presencia en la ciudad, donde ya se registró un atentado suicida en mayo de 2017 en el que murieron 22 personas a la salida de un concierto de Ariana Grande.

Reino Unido se encuentra en su segundo nivel de amenaza más alto, lo que significa que se considera altamente probable que se produzca un ataque.