El Parlament de Cataluña se vuelve a constituir en una situación excepcional, y una muestra de ello es cómo el presidente de la Mesa de Edad, Ernest Maragall, arrancó la legislatura recordando a los presos. "Ya lo ven, ni el President de la Generalitat ni los miembros del Govern se sientan hoy donde tocaría", empezaba Maragall.

Lazos amarillos sobre los escaños de los políticos presos y sobre estas ausencias, la Mesa de Edad no ha permitido delegar el voto a la parte del Govern en Bruselas, algo que sí ha permitido a los que están prisión "por considerar que incurre en la causa de incapacidad prolongada".

Inmediatamente han vuelto las protestas de Ciudadanos contra la Mesa de Edad porque, en su opinión, "no se puede empezar con mal pie saltándonos el reglamento del Parlament". También ha protestado Santiago Rodríguez, del PPC, "discrepando de la interpretación de la Mesa".

El PSC, por su parte, también ha pedido la palabra, pero lo ha hecho para dar la razón a la Mesa de Edad porque creen que es "la mejor interpretación posible tanto de la interlocutoria del juez como del informe de los letrados de la Cámara".

La votación ha seguido adelante, y en ella Marta Rovira ha votado por Junqueras, mientras que Turull lo ha hecho por Forn y Sànchez.

Finalmente, un largo aplauso para los que no pudieron votar antecedió al anuncio previsto del nuevo presidente del Parlament: Roger Torrent. En su discurso, que empezó con tono conciliador, pidió "respeto a los votos de la gente".