El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha dado por abierta una "nueva etapa en el PSOE de nueve meses de diálogo con los militantes para construir una salida de la crisis", tras diez horas de debate en el Comité Federal.
Al término de una reunión que ha calificado de "intensa" y "muy positiva", el líder socialista se ha declarado "enormemente satisfecho" y ha explicado que empieza la Conferencia Política que culminará en octubre con un nuevo proyecto socialista de salida de la crisis "con servicios sociales y que tenga en cuenta la productividad y el empleo".
Tras asegurar que "no se ha hablado del calendario" de primarias, ha hecho hincapié en que el PSOE ha "recuperado parte del diálogo con los ciudadanos" después de un año de gobierno del PP.
A su juicio, durante ese año algunos sectores que votaron al PP han "roto para siempre" con ese partido, mientras que ciudadanos que antes "daban la espalda" a los socialistas y colectivos que les "ignoraban", hoy están "sentados" con ellos.
Una vez arrancada la "primera fase para recuperar la confianza" de los ciudadanos, Rubalcaba ha llamado a los suyos a "trabajar", porque "los votos hay que merecerlos". "Que nadie piense que los votos que pierde el PP van automáticamente al PSOE", ha dicho.
También ha abogado por encontrar una "fórmula para poner punto y final al rosario de asuntos de corrupción" que tiene a la democracia "herida" y ha incidido en que el nuevo proyecto "reformista" del PSOE incluye una "actualización" o "reforma controlada" de la Constitución Española.
Rubalcaba ha explicado que el PSOE propondrá abrir la Constitución para que el Senado funcione como Cámara territorial, para acabar con conflictos competenciales, para dotar al modelo territorial de elementos federales de los que ahora carece y para que recoja derechos como la sanidad y la igualdad entre hombres y mujeres.
También, para "evitar que un gobierno aproveche la crisis para desmantelar el Estado del bienestar", ha señalado, y ha anunciado una "oposición cada vez más firme y contundente", a la vista de que el Gobierno ha "iniciado una senda irreversible de desmantelamiento del Estado social.