Pedro Sánchez ha cumplido con la tradición y ha mantenido su primer despacho de verano con el rey, tras el cual insistió en que Felipe VI estará en los actos previstos por el primer aniversario de los atentados en Cataluña: "Estarán el rey, la reina y el Gobierno".

Sánchez quiere normalizar la visita del monarca a Cataluña, aunque estos días el presidente de la Generalitat ha dejado claro que no le han invitado y que no acudirán a ningún acto en el que esté convocado el monarca.

Una postura aplaudida desde la ANC porque dicen que el discurso del rey tras el referéndum del 1 de octubre dejó fuera a dos millones de independentistas. Adrià Alsina, secretario nacional de ANC, dice que "Felipe VI se somete al desprecio y a la crítica política".

Para el PdeCat, lo que no es entendible es que ese acto no estén quienes acabaron con la célula yihadista responsable de los atentados, ya que para Carles Campuzano "ofende a miles de catalanes" que ni Forn ni Trapero puedan estar.

El Ayuntamiento de Barcelona, que organiza los actos, dice alejarse de la polémica y asegura que quiere un homenaje sencillo, austero y emotivo con un único protagonista, que deben ser "las víctimas". El acto tendrá lugar en plaza de Cataluña y en la Rambla con una ofrenda floral.