Según han confirmado
fuentes cercanas al caso, una patrulla de seguridad ciudadana del barrio de
Gràcia de Barcelona vio al hombre en actitud sospechosa en un aparcamiento.
El hombre,
que resultó ser el exalcalde de Sant Andreu de Llavaneres Bernat Graupera, estaba
agazapado y llevaba un pasamontañas, dos cuchillos y un aerosol de defensa
personal.
Cuando los
Mossos d'Esquadra le estaban identificando, salió un vecino y le contó a los
Mossos que la persona en cuestión era el exalcalde de Llavaneres, que había
sido condenado en 2014 por acosarle cuando él era trabajador municipal en la
localidad.
El exalcalde
alegó que no tenía la intención de hacer daño al hombre, y que su objetivo era solo
pinchar las ruedas de su coche.
La víctima
de acoso ha presentado una denuncia ante los Mossos d'Esquadra, que han
remitido el caso al juzgado. Se da el caso de que el vecino que había sido
víctima de este acoso había denunciado recientemente que le habían pinchado las
ruedas de su vehículo en dos ocasiones.