El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha agradecido el apoyo del grupo parlamentario del PNV a su moción de censura contra Mariano Rajoy y se ha comprometido a que sea "socio preferente para eventuales cambios legislativos". Sánchez ha pedido a los nacionalistas vascos "comprensión", "empatía" y "predisposición" para esa nueva relación política que "abre un nuevo tiempo para España y para Euskadi".

Tras insistir en que "no entraba en sus planes" presentar esta moción de censura, Sánchez ha defendido que para los socialistas era "necesario trazar una línea roja, un cortaincendios", a la vista de la sentencia del caso Gürtel, "en el sentido de decir nosotros no somos esto y la democracia no lo puede tolerar".

En su respuesta al portavoz del grupo vasco, Aitor Esteban, el líder socialista ha incidido en que el PSOE y el PNV son ambos partidos "centenarios, con hondas raíces" y en que si los socialistas se reivindican como la historia de España, el PNV es la historia del País Vasco".

Sánchez, que ha rechazado que su iniciativa se deba al "oportunismo político", ha hecho hincapié en que, si gana la moción, los próximos meses serán "complicados, difíciles", dada la "fragmentación" del parlamento. No obstante, ha recordado que él mismo fue "víctima de la fragmentación parlamentaria", en alusión a su investidura fallida, pero ha asegurado que ha "aprendido de ella".

"He tenido tiempo de analizar mis errores y le garantizo que, como partido de Estado, intentaremos anteponer los intereses generales a los partidarios", ha prometido. Y ha recordado que esa fragmentación es la "tónica habitual" en otros países de la UE, "pero lo que no hay en Europa son gobiernos que hayan sido sentenciados por hechos tan graves" como el de Mariano Rajoy.

Mientras el propio Mariano Rajoy podría vivir sus últimas horas en la Moncloa, ha plantado al Congreso en la sesión vespertina de la moción de censura. El presidente del Gobierno ha estado 'atrincherado' durante ocho horas en un restaurante donde ha reunido con parte de su entorno más cercano. A su salida, ha evitado responder a los medios sobre si seguirá liderando la oposición y al frente del PP.