Los nueve miembros del jurado comenzaron ayer a las 14.00 horas su deliberación para adoptar un veredicto que no lograron alcanzar en las primeras horas, pero que han hecho público hoy a las 13.30 horas.
Tras el veredicto de culpabilidad, el presidente del tribunal, el magistrado Juan Jiménez, deberá fijar la pena, que será la segunda para Matas por corrupción, después de la condena a nueve meses de prisión por tráfico de influencias establecida el pasado verano por el Tribunal Supremo, por haber favorecido con dinero público a un periodista que le escribía discursos.
El fiscal anticorrupción Pedro Horrach, acusador en el juicio que se llevó a cabo desde el lunes hasta ayer en la Audiencia de Palma, solicitó para el exministro de Medio Ambiente una multa de 9.000 euros, además de la devolución de los salarios que Areal ingresó por figurar como relaciones públicas del hotel Valparaíso de Palma.
El acusado, que en la última sesión de la vista proclamó su "inocencia" tanto en este caso como en todas las otras piezas del Palma Arena en que está imputado, ha escuchado el veredicto en la sala, que ha abandonado sin hacer declaraciones.
Sí lo ha hecho su abogado, Miquel Arbona, que ha asegurado: "Los argumentos que se han presentado, a falta de la sentencia, pueden ser recurridos y los vamos a recurrir".
El jurado considera probado que Matas aprovechó su condición de presidente del Govern balear para solicitar al hotelero Miguel Ramis que pagara a su esposa 3.000 euros mensuales simulando un contrato de trabajo que se prolongó durante todo 2007.
El tribunal popular cree que las pruebas aportadas en la vista han puesto de manifiesto que el empresario se sintió presionado por la posición que ocupaba el entonces líder del PP balear.
Como consecuencia, simuló la contratación de Areal como empleada del hotel Valparaíso, con un salario mensual de 2.938 euros que sumado a dos pagas extras le reportaron ingresos de 42.111 euros.
Este dinero fue cobrado por la esposa del presidente, según ha considerado demostrado el jurado, sin que Areal llevara a cabo tarea alguna, por lo que constituía un simple regalo en consideración al poder de su marido.
En su pronunciamiento, el jurado expresa también su oposición a que Jaume Matas se beneficie de una suspensión de la condena y a que le sea concedido el indulto por parte del Gobierno en el caso de que lo solicitara.
Matas, que tiene recurrido el ingreso en prisión por la condena firme a nueve meses que se le impuso por la primera pieza juzgada del caso Palma Arena, ha resultado igualmente condenado, aunque solo en primera instancia, en el segundo juicio de la veintena a los que previsiblemente se tendrá que enfrentar por esta gran causa contra la presunta corrupción durante su última etapa como presidente del Govern balear (2003-2007).