En tres autos, el magistrado ha admitido otras tantas querellas de las siete que interpuso el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) el pasado mes de febrero por gestión desleal contra los exresponsables del banco valenciano y varios empresarios, la mayoría constructores.

La primera va dirigida contra el ex consejero delegado Domingo Parra, el director de participaciones inmobiliarias del banco, Alfonso Monferrer, y los empresarios Salvador Vila, Juan Bautista Soler Luján, Fernando Polanco, el notario Carlos Pascual y Teresa Villalba, a los que imputa tres delitos de apropiación indebida o, alternativamente, tres de administración desleal.

También contra las sociedades Salvador Vila S.L., Urbanas de Levante y Faverch Desarrollos como responsables civiles subsidiarios. En otra, el juez imputa tres delitos de apropiación indebida a Parra, Monferrer y Bartolomé Cursach, y señala como responsables civiles a las sociedades Intrademallorca 2005, Magainver, Calviá Parc y Tito's.

Por último, en el tercero de los autos, el magistrado requiere al Juzgado número 17 de Madrid lo investigado sobre un préstamo de 312 millones a Construcciones Valencia Constituciones S.L., destinado a la compra de acciones de Metrovacesa, ya que es la misma operación que denunció el FROB en una de sus acciones penales, que es la tercera que admite a trámite.

Así, Pedraz rechaza la petición del empresario Rafael Ruiz-Jarabo para que fuera el juzgado madrileño el que lo instruyera, y queda finalmente imputado por la Audiencia Nacional junto al expresidente de Metrovacesa Joaquín Rivero y Domingo Parra por falsedad en documento mercantil, tentativa de estafa y apropiación indebida.

Mientras, el promotor Juan Bautista Soler Crespo aparece como partícipe a título lucrativo. Según el magistrado, la financiación aparece como concedida a Arlette Dome S.L. y Sapa S.A., y para ella se habrían utilizado pagarés falsos, en cuya elaboración "podría haber participado" Domingo Parra. En otra de las cuatro querellas, aún no admitidas a trámite, el FROB denuncia una operación inmobiliaria conjunta entre el Banco de Valencia y Bancaja Hábitat valorada en 300 millones de la que acusa a los exdirectivos de ambas entidades José Luis Olivas y Aurelio Izquierdo.

Todas ellas son causas separadas de la que ya instruye el propio Pedraz desde el pasado mes de junio, cuando admitió la primera denuncia del FROB contra a los antiguos responsables de la entidad por estafa, apropiación indebida y administración desleal.

La denuncia se dirigía, principalmente, contra Domingo Parra, Aurelio Izquierdo y el presidente de Aguas de Valencia Eugenio Calabuig. De acuerdo con este escrito, Parra intervino en una serie de operaciones "de dudosa racionalidad económica" al haber obtenido, por vía directa o indirecta, beneficios en perjuicio del patrimonio del Banco de Valencia, al que provocó un agujero cercano a los 137 millones de euros.

Entre esas operaciones, destacaba la compraventa de participaciones de la sociedad Inversiones Financiera Agval en 2008, la adquisición de acciones de la sociedad Costa Bellver o la concesión de financiación a favor de la sociedad Capital Residencial, en la que han participado de forma relevante, como autores o partícipes, ciertos integrantes de la familia Calabuig.