Ha sido pasadas las 4,45 horas de este viernes 12 de julio cuando la magistrada de Instrucción número 6 de Sevilla ha notificado el auto en el que, atendiendo la petición de la Fiscalía, ordena el ingreso en prisión sin fianza de Castaño por los presuntos delitos de cohecho, prevaricación, blanqueo de capitales y fraude y exacciones ilegales.
Asimismo, le ha impuesto una fianza de responsabilidad civil de 7,6 millones de euros, frente a la petición de 360.000 euros planteada por el Ministerio Público.
La juez ha tomado esta decisión después de que el imputado se haya acogido a su derecho constitucional a no declarar, como ya hizo ante la Guardia Civil
De su lado, la instructora ha dejado en libertad sin fianza a su esposa, la abogada Ana María Vaquero, quien también se ha acogido a su derecho a no declarar y a la que imputa los delitos de cohecho, prevaricación y blanqueo de capitales. Así, únicamente ha acordado que se le retire el pasaporte.
Antes, la juez ha acordado dejar en libertad con cargos y sin fianza a los dos empresarios que fueron detenidos por la Guardia Civil junto a Castaño y su mujer, como son el administrador de la empresa de infraestructuras y medio ambiente Fitonovo, Rafael González Palomo, y el exadministrador de Fiverde Angel Manuel Macedo.
Durante su declaración ante la juez, el administrador de Fitonovo ha asegurado que, entre los años 2005 y 2006, entregó un sobre con 30.000 euros a Domingo Enrique Castaño y que le dijeron que este sobre con la cantidad de dinero referida "era para el PSOE", punto en el que ha subrayado que el dinero entregado "no era a cambio de nada", porque además "los contratos ya estaban dados".
También ha dicho que entregó a Castaño siete teléfonos móviles Nokia para que los repartiera, aunque no ha precisado quiénes serían los últimos destinatarios de estos teléfonos.
Esta operación viene derivada de la investigación en torno a las supuestas irregularidades detectadas en el concurso promovido para enajenar los suelos de Mercasevilla, en el marco de la cual la magistrada pidió a la Guardia Civil que investigara el enriquecimiento "sospechoso" de Castaño.
A raíz de esta investigación, los agentes habrían llegado a la conclusión de que Domingo Enrique Castaño pudo recibir dádivas -incluido un coche marca Audi- a cambio de la concesión de contratos de mantenimiento a las empresas referidas.
Además de los cuatro detenidos, la Guardia Civil imputó en el marco de la operación 'Madeja' a la mujer del administrador de Fitonovo, Pilar Baró, y al responsable de una gestoría que le llevó las cuentas a esta empresa, Francisco Orozco, quienes han comparecido ante la juez esta madrugada y han quedado también en libertad sin fianza.