El exministro Josep Piqué, que ha fallecido este jueves en Madrid, combinó una extensa trayectoria política, marcada por un perfil pactista, que incluye haber sido ministro y portavoz en la presidencia de José María Aznar, con una nutrida trayectoria como directivo, en empresas como OHL o Vueling.

Nacido el 21 de febrero de 1955 en Vilanova i la Geltrú (Barcelona), Piqué arrancó su trayectoria profesional como profesor de economía en la Universidad de Barcelona, donde fue compañero de promoción de la exministra Anna Maria Birulés.

En 1986 fue nombrado director general de Industria de la Generalitat, cargo para el que fue "fichado" por el entonces conseller de ERC Joan Hortalá, y, pocos años más tarde, fue director general de Estrategia Corporativa de Ercros. Tras simpatizar con el PSUC durante su juventud y pasar por la empresa privada, 1996 se convirtió en su año clave puesto que fue cuando Aznar se fijó en él para la cartera de Industria de su primer Consejo de Ministros.

Piqué entró en el ejecutivo como independiente, aunque años más tarde acabaría afiliándose al PP, para convertirse más tarde en portavoz del Gobierno, ministro de Exteriores y, finalmente, titular de Ciencia y Tecnología. De esa etapa política proviene una galería de fotos con personalidades como Kofi Annan, el Papa Juan Pablo II o Madelaine Albright.

Un perfil propio

En cuanto a su trayectoria en el seno del PP, el expresidente del Gobierno José María Aznar creyó que Josep Piqué sería el político ideal para atraer a los votantes de CiU hacia el PP, y con ese propósito le aupó a la presidencia del PP catalán en 2002.

Nombres como Josep Maria Trias de Bes, Juan Manuel Fabra, Aleix Vidal-Quadras o los hermanos Alberto Fernández Díaz y Jorge Fernández Díaz han intentado anteriormente buscar un hueco para los populares en Cataluña.

Hombre de gran capacidad oratoria y amante del discurso estructurado y de la lectura, Piqué demostró sus capacidades oratorias en el Parlament y en toda su etapa política destacó por su perfil pactista y dialogante.

No obstante, como presidente del PP catalán también intentó que los populares tuvieran un perfil diferenciado del PP estatal, y esa voluntad le valió fricciones con la dirección estatal de la época. Tuvo diferencias de criterio, por ejemplo, por la estrategia en torno al nuevo Estatut.

Precisamente en julio de 2007 Piqué acabó chocando con la dirección nacional de su partido por unos nombramientos hechos en Cataluña y presentó su dimisión irrevocable como presidente del partido tras enviar una carta al líder del PP, Mariano Rajoy.

Apasionado de la lectura y admirador de Winston Churchill y Marco Polo, Piqué era licenciado en Derecho y doctor en Ciencias Económicas y Empresariales.

Su faceta empresarial

En cuanto a su faceta más empresarial, Piqué lideró la química Ercros entre 1992 y 1996 y en 1995 fue elegido presidente del influyente Cercle d'Economia. No obstante, como ministro de Industria y Energía, lideró procesos de privatización de las empresas públicas del Estado.

A finales de 2007 asumió la presidencia ejecutiva de la inmobiliaria Mixta África y en noviembre de ese año se convirtió en presidente de la aerolínea Vueling.

En esta etapa como primer ejecutivo de la aerolínea, que duró hasta 2013, se llevó a cabo la fusión con Clickair y potenció las conexiones nacionales y europeas de la aerolínea, en un gran momento de competencias entre las low cost.

Como directivo, las personas que trataron con él destacan que eran muy ambicioso en los objetivos que se marcaba. El último gran capítulo de su trayectoria como directivo arranca en octubre de 2013, cuando fue nombrado consejero delegado del grupo OHL, que entonces presidía y capitaneaba el empresario Juan Miguel Villar Mir.

Su incorporación se vio aplazada cerca de un mes después de que el ex ministro sufriera una hemorragia cerebral superficial que le obligó a estar ingresado en el Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.

Tres años más tarde, y una vez que Villar Mir cedió el testigo en la presidencia de la compañía a su hijo Juan, Piqué acordó su salida de OHL con una indemnización de 2 millones de euros y un acuerdo de no competencia. En los últimos años el exministro también fue consejero de otras grandes compañías como Sea, Abengoa, Amadeus o consejero de Mapfre para el negocio internacional.