"Cuántas horas de sueño me ha quitado usted". Así saludó Adolfo Suárez a Santiago Carrillo hace 37 años. Fue en una reunión clandestina que tenía un claro objetivo: legalizar el Partido Comunista.

Solos, Suarez y Carrillo frente a frente. Son los turbios años comprendidos entre la muerte de Franco y la actual Constitución. Es la obra que se interpreta estos días en el Teatro Real. Para el actor, José Manuel Seda, meterse en el papel del líder de la transición ha sido un trabajo "duro pero fascinante".

Un actor que sobre las tablas tiene en sus manos el futuro de España. Porque tan sólo unas semanas antes, en enero del 77 había tenido lugar la matanza de Atocha. Un personaje osado en la vida real y que para representarlo exige una complicada labor de documentación.

Dos hombres que discuten, se ponen a prueba e incluso se amenazan. Dos políticos totalmente opuestos que, sin embargo, supieron llegar a acuerdos, y cinco semanas depués el Partido Comunista fue legalizado.