La española Aysha Frade, que también tenía nacionalidad británica, hacía todos los días el mismo camino de vuelta del centro de enseñanza español donde era jefa de su departamento.

La mujer era de origen gallego, concretamente de Betanzos, donde sus hermanas tienen una academia de inglés, aunque ella llevaba muchos años residiendo en Londres, casada y con dos hijas.

En un inicio, el Ministerio de Exteriores confirmó que ninguna víctima era española porque Aysha Frade tenía también pasaporte británico, pero después se confirmó la trágica noticia.