A través de un comandante del Ejército, desde el patio de la base militar, el gobierno de Venezuela anunciaba haber neutralizado el intento de alzamiento dentro de sus filas. Uno más de los que el país ha vivido en los últimos meses. "Nos declaramos en legítima rebeldía, hoy más que nunca".

Así arrancaba el vídeo que la 41 Brigada Blindada de Valencia, la segunda ciudad del país, ha compartido en Internet para, según aseguran, intentar restablecer el orden institucional. El Ejército actuó rápidamente para controlar la sublevación. El choque entre militares ha dejado al menos un fallecido, otro herido grave y siete detenidos.

Por su parte, el régimen asegura que todo ha vuelto a la normalidad mientras seguía la confusión y el caos en los exteriores del cuartel de valencia. "Abajo cadenas", han gritado los manifestantes junto a la verja de entrada, cantando el himno nacional frente al movimiento de tanques y helicópteros, y bolas de goma y gases lacrimógenos para dispersar a la muchedumbre que apoya a los militares rebeldes.

Unos disturbios que han llevado a suspender la sesión de la Asamblea Constituyente en su segundo día de andadura. Este es el resultado de un país totalmente dividido, con dos Asambleas Nacionales, en el que los problemas sobrepasan la barrera política. "Con la constituyente lo que viene es más hambre. Más allá de las persecuciones que puedan venir sobre nosotros", ha afirmado el líder opositor Henrique Capriles

En un gesto para rebajar la tensión en el país, Maduro ha excarcelado al opositor Leopoldo López por segunda vez. Pese a las presión internacional por conseguir su libertad, López tendrá que seguir su condena bajo arresto domiciliario.