Michelle Obama revela secretos celosamente guardados durante sus años en la Casa Blanca. El mundo siempre ha visto al matrimonio en una especie de luna de miel perpetua, pero a veces han necesitado ayuda profesional: "Trabajamos en nuestro matrimonio y obtenemos ayuda cuando lo necesitamos".

Michelle también detalló cómo ambos se enamoraron y cuenta que no fue amor a primera vista: "No solo no estaba interesada, quedaba fuera de los límites. No iba a tener una cita".

Rompiendo lo que aún hoy es tabú, ha revelado que sus hijas fueron fecundadas in vitro y que sufrió un aborto: "Me sentía sola y perdida. Sentía que había fracasado. No sabía cómo se producían los abortos porque no se hablaba de eso".

Cuando Barack Obama decidió intentar llegar a la Casa Blanca, Michelle no lo veía posible por puro escepticismo racial: "Teníamos miedo a la esperanza. Es duro creer que el país que te ha oprimido pueda estar gobernado por ti algún día".

Cuando Trump ganó las elecciones, Michelle se reunió con Melania y le dijo que la llamara si necesitaba algo pero "no ha llamado". Confiesa que para ella la jura de Trump fue un día duro, por eso fue incapaz de sonreír durante toda la ceremonia.