Las sirenas no dejan de sonar en el este de Ucrania. Los voluntarios se apresuran a ayudar a los vecinos con movilidad reducida a evacuar la zona ante el avance de las tropas rusas. La situación en el Donbás, donde Putin ya tiene en sus manos una importante ciudad más, es extremadamente grave. "La ciudad de Limán ha sido completamente liberada de los nacionalistas ucranianos", ha anunciado recientemente Igor Konashenkov, portavoz principal del Ministerio de Defensa ruso.

En tan solo dos semanas se ha recrudecido la ofensiva rusa en el este. Su objetivo es llegar hasta Sloviansk y hacerse con la mayor parte del territorio de la región. Tras Limán, los esfuerzos se centran en Severodonetsk y Lisichansk, donde vuelven a presenciarse terribles imágenes: las de las víctimas de la guerra que se acumulan en las fosas comunes. El ejército ucraniano está replegando tropas y a los vecinos de estas ciudades solo les queda huir.

"No quiero que nadie pase por esto, es aterrador", lamenta una mujer entre lágrimas. La mejor forma de parar a Rusia, según ha asegurado el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, es que las sanciones contra el país invasor sean efectivas. "Rusia está eludiendo la mayoría de las sanciones hoy porque no existe una posición fuerte unida del mundo entero contra su agresión", ha denunciado el mandatario ucraniano. Pero Putin amenaza con no desbloquear la exportación del grano si no se levantan esas sanciones.

Así, ahora mismo la preocupación es máxima. El riesgo de una crisis humanitaria es extremadamente elevado. Por eso, la Unión Europea plantea poner en marcha una misión naval para sacar el grano desde Odesa. No obstante, el Mar Negro se encuentra ahora plagado de minas ucranianas, y muy vigilado por buques y submarinos rusos. Lo que provoca que esta misión suponga un choque directo contra la armada rusa.

Así de tajante se ha expresado respecto a esta cuestión John Kirby, secretario de prensa del Pentágono de EEUU: "No vamos a tener tropas estadounidenses luchando en Ucrania. Eso incluye la posibilidad de un conflicto naval con Rusia". Mientras, Ucrania parece haber pasado a la ofensiva en el sur y ya se prepara para recuperar Jersón cuando se cumplen tres meses desde el inicio de una guerra que, según todo apunta, va para largo.