Wray contó con el
respaldo de una amplia mayoría de los senadores, con 92 votos a favor y solo 5
en contra. De este modo, pasará a encabezar el FBI, una agencia policial clave
en la inteligencia de EEUU, en plena investigación sobre la supuesta
interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales del pasado año y los
posibles vínculos entre Moscú y la campaña de Trump, el entonces candidato
republicano.
No se esperaban
sorpresas en la votación, ya que la oposición demócrata había expresado su
respaldo a Wray. "Es realmente importante que tengamos a un director del
FBI fuerte. No puede haber manipulación", dijo Dianne Feinstein, la
senadora demócrata de más rango en el Comité Judicial de la Cámara Alta.
La investigación de la
trama rusa está a cargo del fiscal especial Robert Mueller, exdirector del Buró
Federal de Investigaciones (FBI), y que fue nombrado por el Departamento de
Justicia. Durante las audiencias de confirmación, el nuevo director del FBI
defendió su independencia y respeto a la Constitución.
"Nunca permitiré
que el trabajo del FBI sea conducido por algo más que los hechos, la ley y la
búsqueda imparcial de la justicia. Punto", afirmó Wray ante los senadores
en referencia a la polémica suscitada por Trump, quien pidió
"lealtad" a Comey, poco antes de despedirlo. "Mi lealtad es a la
Constitución y al imperio de la ley, y seguiré respondiendo ante ellos",
subrayó el entonces candidato a encabezar el Buró.