La oposición ha denunciado la muerte de otros dos manifestantes en los estados de Aragua y Táchira. Se trataría de Jimmy Vargas, de 34 años, al caer de un balcón cuando la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) disparaba perdigones contra los opositores y Jhonny Carballo, que habría recibido un disparo por parte de un grupo de motorizados.

En concreto, Vargas se resguardaba de los gases y perdigones disparados por efectivos de la GNB en San Cristóbal (Táchira), según ha informado la madre de la víctima, en unas declaraciones que recoge el diario venezolano 'El Nacional'. "Le dieron con una bomba en la cabeza, perdió el equilibrio y cayó", ha explicado.

El joven fue trasladado a una clínica privada donde intentaron estabilizarlo, pero las lesiones en cráneo y torso fueron tan severas que falleció 45 minutos después de su ingreso. Por su parte, en Cagua (Aragua) Jhonny Carballo, de 34 años, ha sido víctima del ataque de motorizados armados que dispararon contra la protesta que se realizaba en el sector Fundacagua, de acuerdo al testimonio de Ricardo Sanchez, vecino de la zona.

Sin embargo, el gobernador del estado de Aragua, Tareck El Aissami, del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), ha culpado a los propios manifestantes de la muerte de este joven. "Hemos hecho todo para garantizar la paz en Aragua, pero el fascismo provocó la muerte de un aragüeño. ¡Justicia!", ha escrito en su perfil oficial en Twitter.

Entre tanto, el Ministerio Público ha encomendado a los fiscales 32º de Aragua y 3º de Táchira, Rolando García y Nelson Montero, respectivamente, la investigación por ambas muertes, ocurridas este lunes durante hechos de violencia registrados en Cagua y San Cristóbal.