Los italianos podrán llevar el apellido de la madre, tal y como ha declarado el Tribuna Consitucional al considerar que es inconstitucional la atribución automática del apellido paterno como expone la actual legislación italiana.
La decisión se ha tomado después de que los magistrados acogieran el recurso de una pareja italiano-brasileña. La pareja denunció que se les impidiera poner a su hijo el apellido de ambos, tal y como ocurre en España o Brasil. El niño, con doble nacionalidad, tiene dos pasaportes. Mientras que en el brasileño aparece con el apellido de ambos, en el italiano sólo le permitieron el paterno. El Código Civil italiano establece que «el hijo asume el apellido del progenitor que le reconoce antes» pero, en caso de que tal reconocimiento sea común por parte de ambos padres, el hijo recibe únicamente el apellido del padre.
A partir de ahí Manuela Magalhaes y Marcello Galli -así se llama la pareja- iniciaron una batalla judicial por lo que consideran derechos civiles de su hijo, que ha durado años pero que finalmente ha llegado a buen puerto. El niño tiene ahora 4 años. Aun así todavía queda un largo camino por recorrer. Tras la sentencia, los progenitores podrán poner el apellido de los padres si así lo solicitan, pero si no existe una petición expresa se favorecerá automáticamente el apellido paterno.
Para cambiar esta situación tendrán que esperar a que aparezca una nueva ley, que ya está redactada y que fue aprobada por la Cámara de los Diputados en 2014, pero que se encuentra paralizada en el Senado a la espera de que la Cámara alta le dé el visto bueno.
No es la primera vez que aparece esta polémica, ya en 2014 el Tribuna Europeo de Derechos Humanos calificó de discriminatoria la normativa que establece que los italianos e italianas tengan como único apellido el paterno e instó a cambiarla.