Fueron condenados a cadena perpetua
Niegan la libertad condicional a los hermanos Menéndez, quienes asesinaron a tiros sus padres en su casa de Los Ángeles
El contexto Ambos fueron condenados a cadena perpetua hace 36 años. El juicio se retransmitió por televisión y su fama en EEUU se disparó, hasta el punto de que se llegó a hacer una serie de televisión sobre el caso.

Una junta de revisión de California ha negado la solicitud de libertad condicional a Lyle Menéndez, quien corre con la misma suerte que su hermano Erik, por lo que ambos permanecerán en prisión cumpliendo la pena de cadena perpetua por el asesinato de sus padres en 1989.
Durante la audiencia, la jueza declaró que los asesinatos cometidos por los Menéndez el 20 de agosto de 1989 muestran "un notable nivel de inestabilidad y odio hacia el otro", por lo que rechazó la solicitud de Lyle de obtener libertad condicional.
Precisamente, el pasado jueves la junta tomó la misma decisión sobre Erik Menéndez, quien recibió el fallo negativo en una audiencia virtual de 10 horas que incluyó declaraciones de la Oficina del Fiscal de Los Ángeles y muchos testigos del caso que son considerados víctimas del crimen, que cumplió 36 años desde su comisión este 20 agosto.
De esta forma, ambos hermanos continuarán pagando su condena en la prisión de Richard Donovan, ubicada en San Diego, California, a pocos kilómetros de la frontera con México.
Por su parte, familiares de los Menéndez han expresado en un comunicado que están "decepcionados" por la decisión de la Junta de Revisión, pero han dicho que seguirán buscando las medidas legales para lograr su liberación y esperan que los recursos presentados sean revisados por otro tribunal en la ciudad de Los Ángeles.
Se cumplen 36 años del doble asesinato
Las decisiones judiciales han cortado el camino hacia la libertad de Lyle y Erik Menéndez, quienes asesinaron a sus padres en su casa de Beverly Hills. Los hermanos asesinaron a sus padres, José y Kitty Menéndez, con escopetas mientras estos veían la televisión el 20 de agosto de 1989.
El caso generó una gran conmoción nacional por la brutalidad del crimen y el perfil adinerado de la familia. Por su parte, los hermanos fueron condenados a cadena perpetua sin libertad condicional en 1996, tras dos juicios muy mediáticos.
En ese momento, la defensa de los hermanos alegó abusos sexuales por parte del padre, pero el jurado no lo consideró suficiente para justificar el doble homicidio. Inicialmente, Erik y Lyle afirmaron a la Policía que encontraron los cuerpos sin vida de sus padres tras haber pasado la tarde fuera de casa, pero levantaron sospechas cuando comenzaron una vida de excesos tras acceder a la fortuna familiar. Finalmente, los hermanos fueron detenidos y condenados a cadena perpetua.
El caso fue tan sonado que incluso se hizo una exitosa serie: 'Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menéndez', a la que se sumó un documental sobre los hermanos.