Los negociadores del Parlamento Europeo y de los Estados miembros de la Unión Europea alcanzaron este martes un acuerdo político para fijar las primera norma comunitaria contra la violencia machista. Una directiva que penalizará en toda la UE la ablación genital, el matrimonio forzoso o el ciberacoso, pero que deja fuera el delito de violación ante la falta de acuerdo para establecer una definición basada en el consentimiento.

La nueva directiva, que necesita aún el visto bueno de la Eurocámara y del Consejo Europeo, castigará no obstante en todos los países de la UE la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado, el intercambio no consensuado de imágenes íntimas, el ciberacoso, el señalamiento en redes sociales y la incitación al odio o la violencia contra las mujeres a través de Internet como formas de violencia de género.

También prevé disposiciones para armonizar sanciones, circunstancias agravantes, jurisdicción y plazos de prescripción y establece normas mínimas en lo que respecta a los derechos de las víctimas y medidas de protección y apoyo, obligando por ejemplo a las autoridades a evaluar desde el primer momento el riesgo que representa el sospechoso para poder adaptar las medidas de protección.

En los casos en que la víctima sea menor de edad, la nueva legislación obliga a las autoridades de los países europeos a garantizar que esta recibe la asistencia de profesionales capacitados para trabajar con niños y a que, si el presunto agresor es su responsable parental, la denuncia no dependa de su consentimiento y se proteja a la menor antes de informarle sobre la denuncia.

Sin acuerdo para incluir la violación

Sin embargo, esta primera directiva europea sobre violencia de género, si bien contempla una serie de delitos contra las mujeres que serán considerados como tal en todos los Estados miembros, no tipifica penalmente la violación basándose en la falta de consentimiento, una de las reivindicaciones clave de la Eurocámara.

Meses de negociaciones culminaban así con una victoria para los partidarios de no mencionar el delito de violación en la directiva, al considerar que no había base legal para ello, como Francia, Alemania o Hungría, frente a quienes sí querían incluirlo: el Parlamento Europeo al completo y 13 Estados miembros, entre ellos España.

"Hoy hemos logrado un hito, pero es el principio, no es el final", indicaba en este sentido una de las negociadoras de la Eurocámara, la eurodiputada del Partido Popular Europeo Frances Fitzgerald, tras el acuerdo. La parlamentaria conservadora reconocía además su "decepción" por el hecho de que finalmente el sexo sin consentimiento no haya quedado recogido como violación en la norma.

Los servicios legales del Consejo Europeo habían advertido en un informe de que la reforma que se negociaba no ofrecía la base legal necesaria para abordar la violación, ya que sería necesario tipificarlo primero como delito europeo y esto requeriría de una decisión paralela por unanimidad. Un razonamiento que Fitzgerald rechazó, aduciendo que la experiencia con otras directivas -como la de trata y explotación sexual- demuestran que hay espacio en los Tratados para avanzar en esta línea.

Durante las negociaciones, explicó la eurodiputada, se logró convencer a un bloque de países hasta contar con el apoyo de "13 Estados miembro", una mayoría insuficiente, puesto que era necesaria una mayoría cualificada de un 55% de países miembros -al menos 15- que representaran a al menos el 65% de la población europea.

Pese a ello, la eurodiputada 'popular' valoraba que se hayan logrado avances en la 'hoja de ruta' contra la violencia de género, incluida la obligación de los gobiernos de tomar medidas para concienciar contra el sexo sin consentimiento. En este sentido, la Eurocámara logró incluir a última hora en el texto que las campañas de concienciación contra la violación "deben ir dirigidas a aumentar la conciencia de que el sexo sin consentimiento es considerado un crimen" y que el consentimiento"debe darse de manera voluntaria como resultado del libre albedrío de las personas".

Reacciones políticas

"Hay que seguir, no hay nada imposible", señalaba por su parte otra de las negociadoras, la eurodiputada socialista Evin Incir, que recordaba la dificultad de legislar con países que, como Hungría, rechazan de plano cualquier decisión sobre políticas de género a nivel europeo.

Por su parte, la eurodiputada María Eugenia Rodríguez Palop reivindicaba que la nueva normativa es "un paso gigante en favor de millones de mujeres en la Unión Europea", pero ha lamentado que "por culpa de algunos Estados, como Francia y Alemania, la violación no será incluida como un tipo penal dentro de la Directiva". No obstante, incidía en que sí se ha logrado incluir "campañas educativas para que la gente interiorice que sexo sin consentimiento es violación".

"Los Estados tendrán que garantizar la protección y el acceso a la Justicia para todas las víctimas de todas las violencias machistas, también de violación, y estarán obligados a recoger datos que hasta la fecha brillan por su ausencia", destacaba la eurodiputada, señalando que "en el futuro tendremos que mejorar esta directiva" y que se ha dejado abierta la puerta a modificarla en cinco años desde su transposición, "con la posibilidad de incluir nuevos delitos".

"Las víctimas necesitan apoyo. Los agresores deben enfrentar un castigo. Las mujeres merecen protección. No nos detendremos aquí", proclamaba a su vez la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, en un mensaje en las redes sociales en el que aplaudía que la Unión Europea sea "pionera" en la persecución de la violencia física y psicológica contra la mujer. La vicepresidenta de la Comisión Europea encargada de Estado de derecho, Vera Jourovoa, celebró también lo que calificó como un logro "histórico".

Por su parte, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, también se refirió al acuerdo alcanzado este martes como "un gran paso adelante para los derechos de las mujeres en Europa, que estarán más protegidas". "Por primera vez, la Unión Europea logra un acuerdo sobre una Directiva específica para combatir la violencia contra las mujeres", recalcaba el jefe del Ejecutivo en un mensaje en la red social 'X'.