Más de 100 días de protestas y más de 90 muertos. Según los opositores, esta presión social es la que ha acabado con el encierro de Leopoldo López. Según Maduro, es, simplemente, una decisión de la justica y la acepta: "Acato su decisión y digo más: apoyo la decisión del Tribunal Supremo de Justicia".

Dentro de la crisis que está viviendo el país, su presidente le pide a Leopoldo López que interceda por el fin de la violencia en Venezuela: "Y el señor L.L. Lance un mensaje de rectificación y de paz". Porque si Leopoldo está en casa, es gracias, dicen, a la disposición del Gobierno al diálogo: "El país amaneció con una noticia que es producto del diálogo y del esfuerzo de Nicolás Maduro" ha asegurado Vladimir Padrino, ministro de Defensa de Venezuela.

Maduro señala directamente a la Fiscalía como la responsable de que Leopoldo fuese condenado. Desde esta institución, la fiscal general, figura oficialista que en los últimos meses ha mostrado cierto desacuerdo con el gobierno le pide que no intente limpiar su imagen ensuciando la del ministerio público.

Ahora, el objetivo es que la vuelta a casa de Leopoldo no sea la única. La Fiscalía ya ha pedido que se apliquen las mismas medidas a Daniel Ceballos, Antonio Ledezma y a Lorent Saleh: "Esta no será la primera ni la última medida sustitutiva que pueda otorgarse" ha defendido Tarek William, defensor del pueblo.

Aún quedan 432 presos políticos encerrados en las cárceles de Venezuela. Los opositores vuelvan a echarse a la calle, llamados por Leopoldo López, para pedir la liberación de sus compañeros.