Esta decisión supone eliminar una ley de 1994 que relegaba a la mujer a situarse en la vanguardia del campo de batalla.

Por su parte, Barack Obama ha manifestado apoyar "totalmente" la derogación de esta ley.

El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney,ha explicado que varios altos mandos militares recomendaron levantar la prohibición. "El Objetivo del Departamento  es asegurar que la misión se cumple con las personas más cualificadas y más capaces, sin importar el sexo".

Las mujeres militares han sido parte activa en las guerras de Irak y Afganistán, donde han perdido la vida al menos 130 de ellas y más de 800 han resultado heridas.