Las primeras deportaciones tras el comienzo de la aplicación del acuerdo UE-Turquía serán las de 750 migrantes, que ya están siendo trasladados desde la isla de Lesbos a la ciudad costera turca de Dikii en dos barcos que realizarán varios trayectos entre la capital insular, Mitilene, y la localidad turca.

En los últimos días se han multiplicado los incidentes en diversos campos de refugiados griegos. El viernes los enfrentamientos en el centro de detención de la isla de Quíos dejaron tres heridos y los del puerto ateniense del Pireo terminaron con ocho heridos.

Tras la violencia en el centro de Quíos centenares de refugiados sirios derribaron la valla sin que la Policía se lo impidiese y se dirigieron andando hacia la ciudad con el objetivo, aseguraron, de no tener que convivir con los afganos.

Hasta ahora la tensión se ha registrado sobre todo entre los grupos de sirios y afganos, en la mayoría de las ocasiones durante la distribución de alimentos. A pesar de que el acuerdo entre Bruselas y Ankara hablaba, además de las devoluciones, de un mayor control en el Egeo oriental para evitar las llegadas a las islas griegas, estas no han cesado.

En las últimas 24 horas llegaron a las islas griegas medio millar de migrantes, 364 de ellos solo a Lesbos, por lo que el número de migrantes en los centros de detención asciende ya a 6.156 personas.