La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, ha asegurado que su país le ha ganado la "batalla" a la pandemia de coronavirus al registrar mínimas infecciones diarias y se prepara para dar los primeros pasos hacia el desconfinamiento.

"No hay grandes contagios locales en Nueva Zelanda. Hemos ganado la batalla", ha destacado Ardern en una rueda de prensa en la que se ha mostrado "optimista de que continuaremos en este camino del éxito" para lograr cero infecciones.

"Para lograrlo debemos rastrear a los últimos casos. Es como buscar una aguja en el pajar", ha advertido la mandataria al precisar que el 11 de mayo se evaluará si se rebajan aún más las restricciones.

Un nuevo caso este domingo

Nueva Zelanda, país que ha sido alabado internacionalmente por su manejo de la pandemia y uno de los pocos del planeta que pretende erradicarla completamente, ha registrado desde el domingo un nuevo caso de coronavirus en su territorio insular ocupado por 5 millones de habitantes.

Su tasa de contagio se sitúa por debajo de 0,4 %, mientras que la media internacional es del 2,5 %

Actualmente tiene 1.122 casos confirmados del nuevo coronavirus, cifra que incluye a 19 fallecidos, mientras que su tasa de transmisión se sitúa por debajo de 0,4 %, frente a la media internacional que es de 2,5 %.

A partir de las 23.59 del lunes (12.59 hora peninsular), el Gobierno de Nueva Zelanda rebajará el nivel de alerta 4, que estuvo vigente durante cuatro semanas y que implicó el cierre de todas las actividades y la cuarentena de la población, al nivel 3. Esto significa que se podrán retomar algunos trabajos, aunque se mantendrá durante otras dos semanas el confinamiento para la mayor parte de la población,

Por ello, la mandataria ha pedido a sus compatriotas conservar las medidas de distanciamiento social durante la reanudación parcial de ciertas actividades comerciales y las clases escolares, ya que suponen un mayor contacto entre sus ciudadanos.

Vuelta a los centros de trabajo

Se prevé que un millón de trabajadores retornen a sus centros de trabajo siempre y cuando tengan un plan de control contra la pandemia y se respete las medidas de distanciamiento físico entre las personas.

Arden recuerda que no están retomando la vida social

"Estamos abriendo la economía, pero no estamos retomando la vida social de las personas", alertó la primera ministra al instar a los pobladores a permanecer dentro de sus "burbujas" y reducir los contactos con terceros.

La laborista Arden, reconocida mundialmente por su empatía con las víctimas ante tragedias como la matanza supremacista de Christchurch y la erupción del volcán White Island, no ha descartado la posibilidad de reanudar en unas semanas los vuelos entre su país y Australia y otros destinos del Pacífico.

Dentro de dos semanas, que es el tiempo que demora la incubación del virus, el Gabinete neozelandés volverá a reunirse para determinar si se puede rebajar aún más las medidas restrictivas.