Europol ha advertido en la Comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo (PE) sobre el aumento de la extrema derecha violenta en la Unión Europea, en parte por la "percepción de islamización" derivada de la inmigración.
"El espectro de la extrema derecha violenta se está expandiendo, en parte por el fuel de la percepción de islamización de la sociedad y la ansiedad sobre la inmigración", asegura el informe anual de tendencias del terrorismo de Europol, cuyas conclusiones fueron presentadas.
El director del Centro de Contraterrorismo de Europol, el español Manuel Navarrete, señaló que es "muy preocupante" la tendencia al alza de los grupúsculos de extrema derecha, aunque se congratuló de que los países estén "tomando cartas en el asunto".
Otras conclusiones del informe de Europol, que analiza la actividad en 2017, pasan por la confirmación de que los ataques yihadistas son cada vez más burdos, si bien siguen causando más muertes que ningún otro tipo de terrorismo. Los recientes atentados, dice el texto, demuestran que los terroristas buscan los ataques indiscriminados, contra símbolos de la vida Occidental y contra la autoridad.
Esos terroristas se han criado en la propia UE en su mayoría y se han radicalizado igualmente en territorio comunitario, sin tener que unirse a un grupo en el extranjero. De hecho, Navarrete explicó que han disminuido los terroristas que han vuelto a Europa tras radicalizarse en lugares como Siria en el último año.
Asimismo, el informe da cuenta de que la propaganda por internet sigue siendo esencial para el reclutamiento y que el escaso conocimiento sobre las raíces del Islam de los "aspirantes" al yihadismo "les hace más influenciables a la manipulación" terrorista.
La "degradación" tanto de las estructuras del Estado Islámico como de Al Qaeda no reduce sin embargo el riesgo de nuevos atentados, pues sigue la tendencia de individuos actuando solos y que no pertenecen pero sí simpatizan con esas organizaciones terroristas. El informe recoge que 68 personas murieron asesinadas por terroristas en la Unión Europea en 2017.
En el capítulo de terrorismo separatista o de tipo étnico, se recoge que la banda terrorista ETA no perpetró, en la línea de los últimos años, ningún atentado en 2017 y que su actividad se ha centrado en el "desarme parcial", además de explicar que emitió hace dos meses un comunicado para la disolución.
Navarrete ha querido sin embargo recordar ante los eurodiputados que desde 1958, ETA ha asesinado a más de 800 personas, secuestrado a más de 70 y herido a casi 8.000, así como que más de 400 muertes siguen sin esclarecerse.