Según relató el decano de la Facultad de Medicina, Fernando Tomasina, "un grupo de alumnos" que estaba a punto de acabar su residencia en el Hospital de Clínicas de Montevideo se reunió en la sala de médicos para un "brindis", en el cual hubo bebidas alcohólicas, para celebrar el final de su último turno rotativo.
Al parecer, tras la finalización de dicho festejo, los alumnos se fueron a dormir, a excepción de uno, que quiso gastar una "broma" a sus compañeros y trasladó el cadáver de un recién fallecido al lugar donde descansaban.
Según Tomasina, esta actitud fue "reprendida inmediatamente por el resto de sus compañeros" y una enfermera que se encontraba de guardia devolvió el cuerpo al lugar que le correspondía al cabo de pocos minutos, según confirmó una investigación llevada a cabo por la universidad y el hospital.
El centro universitario decidió expulsar durante seis meses al alumno que trasladó el cadáver hasta que se decida su penalización oficial y amonestar con 30 días de suspensión al resto de los alumnos que participaron en el "brindis" por el hecho de que hubiese alcohol mientras estaban de guardia.
Del mismo modo, este estudiante, al cual le restaban tres meses para finalizar sus estudios, no podrá obtener el título hasta dentro de un año y se encuentra a la espera de la decisión de un comité que evaluará la gravedad de su actitud y que lo sancionará en consecuencia, según un portavoz de la universidad.