Un hombre que rechazó la vacuna de AstraZeneca por miedo a desarrollar coagulación sanguínea se encuentra ahora luchando por su vida en un hospital neerlandés, conectado a respiración asistida. Es la dura historia de un paciente con coronavirus con la que médicos de Países Bajos han puesto de manifiesto la importancia de las vacunas y exigen que se usen todas las que estén disponibles.

La carta abierta de estos sanitarios neerlandeses, que acompañan con una conmovedora radiografía de los pulmones del paciente, va dirigida al ministro de Sanidad en funciones, Hugo de Jonge, en una crítica a la paralización del uso de Janssen, filial de Johnson & Johnson, y de las limitaciones de edad impuestas al uso de AstraZeneca.

No es necesario ser un especialista en pulmones para reconocer la devastación"

"Ha ingresado en nuestro hospital el primer paciente que se negó a recibir la vacuna de AstraZeneca. Oímos el tremendo pesar en su voz y la desesperación en sus ojos. El virus lo ha atacado y podría haberse evitado. Con su permiso, compartimos su escáner de pulmón. No es necesario ser un especialista en pulmones para reconocer la devastación, ni epidemiólogo para explicar los riesgos de no estar vacunado", han alertado los sanitarios en el escrito.

Hasta 80.000 dosis de Janssen almacenadas

Países Bajos tiene almacenadas 80.000 dosis de Janssen desde este lunes a la espera de una recomendación científica de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) sobre su seguridad y su posible relación con seis casos de coagulación sanguínea inusual en Estados Unidos, único país que ha usado ya esta vacuna monodosis.

Además, y después de que la EMA alertara de un "posible vínculo" de AstraZeneca con decenas de casos de tromboembolismos muy raros en personas que recibieron la inyección, Países Bajos decidió usarla solo en mayores de 60 años, un grupo de edad donde la dosis ha mostrado menos casos de este efecto adverso.

Tras los debates sobre AstraZeneca y las divergencias que han mostrado los países europeos sobre si mantener o no la vacunación con esta vacuna, un 42% de los mayores de 60 años aún sin ser inoculados en Países Bajos rechazaron ponerse esta vacuna, según una encuesta de 'I&O' encargada por la televisión neerlandesa 'NOS'.

"El riesgo grave por coronavirus, hasta 70 veces mayor que el riesgo de daño grave por trombosis"

Los médicos firmantes de la carta publicada este viernes, que trabajan en el centro médico Zuyderland, en el sureste de Países Bajos, han alertado de que "el riesgo de daño grave causado por el coronavirus es diez veces mayor para las personas de 40 años y 70 veces mayor para las de 60 años, que el riesgo de daño grave por trombosis" de la vacuna.

"Hasta ahora, hemos atendido a más de 3.000 pacientes con coronavirus y, mientras (usted) habla con expertos sobre la reapertura de la sociedad para ofrecer perspectiva, nosotros todavía vemos a diario las tremendas consecuencias de esta enfermedad", han lamentado

El Ejecutivo neerlandés presentó el pasado martes un plan para "reabrir la sociedad de manera responsable" en las próximas semanas y poner fin al toque de queda a partir del 28 de abril, pero lo condicionó al control de una tercera ola de contagios que está desatada, por lo que esta promesa corre el riesgo de no poder cumplirse hasta mayo.

Sin embargo, este planteamiento es muy criticado por los que trabajan en primera línea contra la pandemia: "Los empleados se preguntan legítimamente por qué deben continuar brindando atención sin la protección adecuada, mientras las vacunas esperan en el refrigerador", han denunciado.

Por ello, estos médicos exigen al ministro de Sanidad que "se deje de retrasar (la vacunación) y provocar inquietud" y le han recordado que "las cifras muestran que los beneficios de la vacunación masiva son abrumadores y no mienten".

"Dejemos que la gente elija si quiere evitar una situación como la de nuestro paciente", han instado, al tiempo que han pedido poner a su disposición "AstraZeneca, Janssen o cualquier otra vacuna". En este sentido, han abogado, como la mayoría parlamentaria, por "la vacunación voluntaria sobre la base del consentimiento informado".

Amenazan con usar sin permiso las dosis disponibles de AstraZeneca

Además, como conclusión a su carta, han amenazado con usar sin permiso las dosis de AstraZeneca que tendrán en la nevera los empleados y médicos del centro hospitalario a partir del lunes, y han advertido de que ya no cooperarán "voluntaria y conscientemente con daños evitables" a través de la vacunación.