Decenas de mujeres inmigrantes marcharon en Washington para pedir al presidente de EEUU, Barack Obama, que frene las deportaciones de indocumentados, en el aniversario de la peregrinación de las 100 millas que realizaron hace un año para llamar la atención del papa Francisco.
Las mujeres iniciaron la protesta en las escalinatas del Tribunal Supremo, cuyos magistrados tumbaron a principios de verano la reforma migratoria de Obama, y marcharon hasta la Casa Blanca para reclamar al presidente que haga "todo lo posible antes de terminar su mandato" en enero próximo para proteger a los indocumentados.
Hace un año, un centenar de mujeres recorrieron las 100 millas que separan un centro de detención de inmigrantes de Pensilvania y Washington coincidiendo con la visita al país del papa Francisco, al que pidieron que alzase su voz en defensa de los inmigrantes.