La presidenta argentina, Cristina Fernández, denuncia la existencia de una historia "muy sórdida" y de "interrogantes" tras la muerte del fiscal Alberto Nisman. En una carta publicada en internet, Fernández pone en duda el suicidio de Nisman y defiende los intentos de su Gobierno por esclarecer el atentado contra la mutua judía AMIA.