El ministro de Comunicación, Ernesto Villegas, fue el encargado de comunicar en una cadena nacional la nueva recaída del presidente venezolano, operado el pasado 11 de diciembre en Cuba y desde hace semanas obligado a respirar a través de una cánula traqueal como consecuencia de una insuficiencia respiratoria.
"Al día de hoy existe un empeoramiento de la función respiratoria relacionado con el estado de inmunodepresión propio de su situación clínica. Actualmente presenta una nueva y severa infección", indicó el ministro. Villegas señaló que "al presidente se le ha venido aplicando quimioterapia de fuerte impacto", entre otros tratamientos complementarios, "con los ajustes derivados de la evolución de su cuadro clínico".
"El estado general continúa siendo muy delicado", añadió. El ministro subrayó que Chávez "se mantiene aferrado a Cristo y a la vida consciente de las dificultades que está afrontando y cumpliendo estrictamente con el programa diseñado" por los médicos. Señaló que el Gobierno acompaña a los familiares de Chávez "en esta batalla plena de amor y espiritualidad" y llama al pueblo "a mantenerse en pie de lucha, incólume ante la guerra psicológica desplegada por laboratorios extranjeros con altavoces en la derecha corrupta venezolana". Según Villegas éstos buscan "generar escenarios de violencia como pretexto para una intervención extranjera en la patria de Bolívar".
Chávez regresó hace dos semanas a Caracas tras más de dos meses en Cuba, donde el pasado 11 de diciembre fue operado por cuarta vez en 18 meses de un cáncer en la zona pélvica de cuya naturaleza no se ha informado. A la entrada del hospital continuaban los controles de policías y miembros de la Guardia de Honor presidencial, mientras un grupo de seguidores del presidente venezolano se congregaban en las cercanías en su apoyo.
En medio de la calle, los seguidores del presidente venezolano cantaron, gritaron consignas e incluso tuvieron la oportunidad de escribirle mensajes en hojas impresas específicamente con la imagen de una de las fotografías recientemente difundidas de Chávez y sus hijas, que posteriormente introducían en una urna de cartón.
Los chavistas se congregaron después de que durante el fin de semana otra manifestación de opositores exigiera respuestas sobre la condición de salud de Chávez, que el Gobierno defina si el presidente esté en condiciones de seguir y, en caso de negativo, que se convoquen elecciones. Un grupo de jóvenes de un grupo denominado Generación 21 se trató de encadenar ante la sede del Consejo Nacional Electoral tras entregar un documento en el que exigían que el poder encargado de los procesos electorales en Venezuela sea "limpio y transparente", aunque la Guardia Nacional lo impidió.
También continúa la protesta de un grupo de estudiantes vinculados con la organización Juventud Activa Venezuela Unida que cumple una semana de manifestación permanente en el municipio caraqueño de Chacao exigiendo que Chávez asuma plenamente sus funciones o se llame a elecciones.