El calor intenso, que todavía perdura en zonas como Málaga, Valencia y Barcelona, donde han pasado una noche ecuatorial, tiene las horas contadas.

Se espera que este domingo las temperaturas se queden por debajo de los 33 grados en prácticamente toda España. De hecho, los avisos por calor de la Agencia Estatal de Meteorología han bajado de nivel, no son rojos, salvo excepciones, sino naranjas.

A pesar de que los cielos están despejados y prácticamente sin nubes, algunos cúmulos formados en el norte de Cataluña y el norte de Castellón pueden dejar tormentas en la jornada de este domingo.

A partir de mañana, último día de la canícula, está previsto que los termómetros desciendan de una manera contundente.

Se espera que las temperaturas mínimas se queden este lunes, en gran parte del país, por debajo de los 20 grados, e incluso por debajo de los 15 en zonas de Castilla y León.

Las máximas, en general, estarán por debajo de los 33 grados. No obstante, en el Mediterráneo se seguirán superando por las tardes los 35 grados y podría haber noches tropicales, o incluso ecuatoriales.

El descenso continuará a lo largo de la semana hasta tocar fondo el miércoles y el jueves, con registros incluso frescos para la época del año.

Respecto al riesgo de incendio en la Península, sigue siendo extremo en multitud de zonas, a lo que hay que sumar el viento, que puede arreciar con fuerza, sobre todo en zonas del Ebro.

Precisamente, el incendio declarado en Añón de Moncayo, Zaragoza, continúa sin control y ha obligado al desalojo de 1.500 personas, como recoge el vídeo que se incluye a continuación.