Ricardo lleva cuatro años viviendo en el centro de Toledo, y cada año, su alquiler sube más, unos 50 euros anuales, según calcula este joven. Las calles medievales de la ciudad atraen cada año más de tres millones de visitantes y en el casco antiguo han aumentado los pisos turísticos, pero, ¿qué ocurre con la vivienda para vivir?

Si comparamos la oferta en dos conocidos portales de alquiler vacacional y para vivienda, comprobamos que los alojamientos turísticos multiplican casi por cinco los que se ofrecen para alquilar, que además han duplicado su precio.

Ante esta situación, el Ayuntamiento quiere poner freno al incremento de pisos turísticos en el centro: para ponerles coto, estos no podrán superar el 20% de las viviendas de su casco histórico. Además, solo podrán situarse en la planta baja o la primera planta. A la espera de que entre en vigor la medida, que no tiene carácter retroactivo, el Ayuntamiento de la ciudad ha paralizado además la tramitación de nuevos pisos turísticos.

La alcaldesa, Milagros Tolón, el gerente del Consorcio de la Ciudad, Jesús Corroto, y el gerente de la Empresa Municipal de la Vivienda, Luis Enrique Espinoza, defendieron al presentar la medida que el casco histórico "llega a tiempo" de poner freno al incremento de pisos turísticos, que en estos momentos suponen el 10% de las viviendas, aunque en alguno de sus 11 distritos superan ya el 20%, por lo que en ellos no podrá haber más alojamientos de este tipo.

La normativa en cuestión solo afectará al casco histórico y establece que ninguno de sus 11 distritos puede sobrepasar el 20% de pisos turísticos. Estos alojamientos solo podrán ubicarse en el primer piso y en la planta baja, salvo si hay un comercio, en cuyo caso solo podrán situarse en la primera planta.

"Lo que no queremos es que la ciudad de Toledo, el casco histórico, se pueda convertir en un parque temático como ya ha pasado en otras ciudades de Europa", resume Tolón, que cita el caso de Venecia.

El objetivo del Consistorio es crear barrios donde vivir y evitar que vecinos como Evelyn abandonen el casco histórico. En en su caso, tuvo que irse después de tres años: "Es imposible pagar el alquiler", asevera la joven.

Comercio de proximidad

Otro de los pilares de la nueva normativa es el apoyo al comercio de proximidad y, a tal efecto, incluirá fórmulas fiscales que beneficien a estos comercios por el servicio que prestan a los vecinos, según explicó la alcaldesa, que precisó que la modificación urbanística tiene como objetivos impedir la especulación, fomentar las viviendas de uso residencial, proteger a los vecinos, evitar problemas de convivencia, apoyar el comercio de proximidad y defender un modelo turístico sostenible.

Medidas que el comercio tradicional, no enfocado al turismo, también valora. "Cuánta más gente se quede aquí viviendo, nos vamos a ver beneficiados", opina Ester Gómez, óptica y optometrista.