La ministra de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, analiza el veto de Rusia a las importaciones agroalimentarias de numerosos países.

A la reunión han sido convocados representantes de las organizaciones profesionales agrarias, de cooperativas agroalimentarias y de la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas vivas.

El encuentro servirá para preparar el comité de gestión convocado por la Comisión Europea, en el que se analizará el impacto del embargo ruso en el mercado agrícola y se estudiarán posibles medidas para paliar las consecuencias para el sector.

Previamente, Bruselas reúne a un grupo de expertos creado para analizar las consecuencias del veto de Moscú para el mercado europeo y realizar un examen lo más completo posible de cara a la reunión de alto nivel con los estados miembros.

Rusia ha decidido prohibir la importación de productos agroalimentarios provenientes de la Unión Europea, Estados Unidos, Australia, Canadá y Noruega, en respuesta a las sanciones impuestas a Moscú por su papel en la crisis de Ucrania.

La prohibición, que durará un año, afecta a las importaciones de ternera, cerdo, verduras, hortalizas, frutas, carne de ave, pescado, quesos, leche y productos lácteos.

El impacto de este veto para la Unión Europea se estima en unos 5.252 millones de euros y de 338 millones para el caso concreto de España. Esta cantidad es el valor que alcanzaron las exportaciones de estos productos a Rusia el pasado año.

El sector hortofrutícola español es el más afectado. Dicho sector teme que esta restricción pueda ser aprovechada por Marruecos, principal competidor español, para hacerse con el nicho de mercado de los productores nacionales.