La tasa de inflación se ha contenido cuatro décimas en junio hasta el 0,4 % interanual, la tasa más baja desde septiembre de 2016, influida por los precios de los carburantes y la electricidad.

Se trata de la segunda vez desde el inicio del año que la inflación se modera después de que en mayo la tasa anual restara siete décimas hasta el 0,8 %, según los datos adelantados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En los meses anteriores la evolución había sido al alza: en enero del 1 % para subir al 1,1 % en febrero, al 1,3 % en marzo y a ese 1,5 % en abril.

Si se confirma la tasa de junio -el INE publica el dato completo del IPC el próximo 12 de julio- sería la menor en casi tres años, desde septiembre de 2016. Detrás de esta moderación de la subida de los precios, el INE señala la evolución de los precios de los carburantes y la electricidad.

Para la economista sénior de Funcas, María Jesús Fernández, el descenso ha sido mayor de lo esperado y se debe, tanto a la caída de los carburantes por el petróleo, como a la bajada más inesperada de los precios de la electricidad con componente más "volátil y difícil de prever".

El Banco de España, en el boletín económico publicado este jueves, también señala que la tasa de inflación en los últimos meses está por debajo de lo previsto, muy vinculada a la evolución de la electricidad, pero mantiene la previsión por encima del 1 % para el año. "Ha sido una caída mayor de la prevista", coincide el analista de Selfbank, Felipe López-Gálvez, que apunta también a los componentes energéticos.

De cara al resto del año, los expertos creen que 2019 puede terminar alrededor del 1 %, por encima de los niveles actuales pero lejos del objetivo del 2 % del Banco Central Europeo (BCE). "Va a depender de los precios de la gasolina (...) y del nivel de consumo" que el BCE podría estimular con bajadas de tipos para intentar repuntar los niveles de inflación, señala López-Gálvez.

Estos niveles de inflación, subraya María Jesús Fernández, refuerzan los objetivos del BCE de mantener su política expansiva e incluso ampliarla. "Vamos a tardar mucho tiempo en ver subidas de tipos", subraya Fernández.

Para el profesor de Economía de Esade Juan Ignacio Sanz, el dato de inflación es "un descenso importante" con una tendencia a la baja "que no es ni positiva ni deseable". Sanz también advierte de la "escasa munición" que tienen los bancos centrales para poder tomar medidas que contrarresten esta tendencia a la baja.

En la evolución mensual, los precios de consumo registran en junio una caída del 0,1 % respecto al mes de mayo. Por su parte, la variación anual del indicador adelantado se sitúa en junio en el 0,6 %. Si este dato se confirma, la tasa anual disminuiría tres décimas respecto al mes anterior.