La economía española aguanta entre las dudas de la economía global pero ralentiza su crecimiento. Entre abril y junio el PIB creció un 0,5%, dos décimas menos que en el primer trimestre de 2019.

Se trata del peor dato de crecimiento de los últimos cinco años. Los expertos lo achacan a las tensiones comerciales, el menor crecimiento en Europa y al frenazo del consumo interno y la inversión empresarial.

Por otra parte, el Ibex 35 ha retrocedido un 0,17% en la sesión de este miércoles, lo que le ha llevado a mantenerse por debajo de la cota de los 9.000 puntos que registró el martes, cuando se anotó su mayor caída del año.

En concreto, el índice ha cerrado en los 8.971 enteros en la última jornada bursátil del mes, anotándose a lo largo de julio una caída del 2,47%.