La elevada proporción de trabajadores a tiempo parcial involuntario y de desempleados desanimados está ejerciendo una "cierta presión a la baja" sobre los salarios, según ha concluido el Banco de España en su artículo 'La moderación salarial en España y en la UEM'. La institución que gobierna Pablo Hernández de Cos ha analizado en esta publicación los factores que explican la evolución de los salarios, utilizando hasta cinco modelos diferentes.

El modelo base, que tiene en cuenta la tasa de paro, la productividad y las expectativas de inflación, refleja que un aumento de un punto en la tasa de paro provoca una reducción del crecimiento salarial próximo a tres décimas y que un incremento de un punto en la productividad conlleva un repunte salarial de siete décimas, mientras que las bajas expectativas de inflación se traducen en un crecimiento salarial próximo a las ocho décimas.

Ahora bien, el Banco de España considera que existen otros factores, como la parcialidad involuntaria o el colectivo de desanimados, que también han tenido un papel relevante a la hora de explicar el "reducido crecimiento" experimentado por los salarios en 2016 y los primeros trimestres de 2017.

Según el organismo, en los últimos quince años, la tasa de trabajadores a tiempo parcial involuntario (aquellos que trabajan menos de 30 horas por semana pero que estarían dispuestos a trabajar más horas) "ha aumentado rápidamente en España", hasta situarse en torno al 8% de la población activa desde un nivel cercano al 2%.