La empresa de reparto Glovo ha eliminado la compensación por tiempo de espera en la recogida de pedidos que abona a sus repartidores que trabajan en régimen de autónomos, ya que esta espera la achaca al "riesgo y ventura" de su actividad, según una comunicación interna remitida a los 'riders'. "La gestión de cualquier contingencia que ocurra durante la entrega de un pedido es tu responsabilidad", señala el citado mensaje, al que ha tenido acceso EFE.

La compañía, con sede central en Barcelona y que forma parte del grupo alemán Delivery Hero, añade en el mensaje que comparte con los que cataloga como 'partners' (socios): "Te recordamos que tienes completa libertad tanto para no aceptar aquellos pedidos que no quieras realizar, así como para rechazar aquellos que has aceptado previamente".

Fuentes sindicales han explicado a EFE que esta compensación se abona a partir del quinto minuto de espera, a contar desde el momento en el que el repartidor llega al restaurante y hasta que se le entrega el pedido. Se trata de una compensación fijada en cinco céntimos por minuto de espera, es decir, tres euros por hora.

Las mismas fuentes inscriben la supresión de este criterio (existen otros, como una base mínima por pedido, un plus por kilometraje o extras en caso de poca demanda) en una estrategia de Glovo para probar que los repartidores son efectivamente autónomos y no trabajadores contratados. Y es que pese a la entrada en vigor de la Ley Rider en verano de 2021, y a diferencia de otras empresas del sector, Glovo sigue operando con repartidores autónomos.

La ahora vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha avisado en reiteradas ocasiones que a Glovo "se le va a exigir el cumplimiento de la legalidad vigente", ya que, según sus palabras, ha optado por "rebelarse" ante la Ley Rider.