David es uno de los 127.000 que han dejado de engrosar las listas del INEM. Acostumbrado a trabajar de dependiente en tiendas de ropa, ahora se está acostumbrando a otro tipo de tareas que, de momento, realizará durante un año. “Han tenido que tener paciencia conmigo en el tema de la hostelería. Para mí ha sido un regalo caído del cielo”, explica.
La del mes de junio ha sido la mayor caída del paro desde 1996. Unos datos relativamente optimistas que hay que contextualizar por la estacionalización.
El economista Santiago Niño observa que en estos datos “no se ha quitado el efecto calendario. Si lo hacemos, esos 127.000 parados menos se convierten en 996 parados más”.
Los expertos cifran en un 94% los contratos temporales que en verano potencia sobre todo el sector turismo. Elena Jiménez cobrará 600 euros por tres semanas de sustitución en la recepción de una empresa. "estando como están las cosas te agarras a lo primero que llegue. Ni la gente ni el país están para escoger", afirma.
Pese a que muchos han hablado de la luz al final del túnel, las previsiones son menos positivas a largo plazo. Santiago Niño señala que después de la crisis "el desempleo estructural rondará el 18%, lo cual es mucho".
De momento ellos han encontrado su oportunidad para demostrar al menos este verano que quieren seguir inmersos en el mercado laboral.
Según 'The Economist'
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La venganza del sur Una década después, esos cerdos que perseguían los hombres de negro hoy vuelan solos. Y lo hacen a gran velocidad. Lideran, con España a la cabeza, el ranking de las mejores economías.