Aunque es alabado por muchos, hay que tener cuidado con el jamón ibérico que compramos. Nos hemos topado con algunos cuya etiqueta apunta que es 100% pata negra, pero es en realidad ibérico de cebo. FACUA ha denunciado su venta: "Puede inducir a error a los consumidores", ha explicado Rubén Sánchez, portavoz de la organización.

Otra confusión llega al comprar jamón en pequeñas cantidades. No siempre se especifica las características del producto que compramos. Leemos ibérico y no vamos más allá. Algunos carteles tampoco especifican el porcentaje de raza. Hay que estar atentos porque no todos los jamones son 100% ibéricos. Se mezclan con otras razas.

Hay que saber que existen cuatro tipos de ibérico diferenciados por etiquetas o puntos de colores: con etiqueta negra, es 100% puro de bellota; con etiqueta roja es 75%-50% ibérico alimentado con bellota; y con etiqueta verde, de 100% a 50% ibérico y con una alimentación basada en piensos y hierbas naturales.

Para que no nos la cuelen, han creado una aplicación para tener toda la información, aunque el mejor consejo es preguntar siempre a los que saben. Todo, según palabras de la vicesecretaria general de UPA, Montserrat Cortiñas, para que "el consumidor sepa lo que compra sin hacer un curso de razas o alimentación".