"No, porque seguimos negociando. Si se marcharan no negociaríamos", ha razonado Manuela Carmena sobre la posible marcha del grupo Wanda. Calvo ha detallado que se reunieron con el grupo inversor chino la semana pasada y que las conversaciones se mantienen. El edil ha avanzado que esa nueva propuesta contempla tanto la "viabilidad técnica" como dar "cumplimiento a la ley".

En ningún momento se plantea la posibilidad de derribar la fachada y reconstruirla ladrillo a ladrillo, algo que, por otro lado, es inviable técnicamente.

La solución pasa por conciliar el cumplimiento de la ley y el mantenimiento de los elementos protegidos junto con la transformación del edificio que quiere hacer Wanda. La fachada "por supuesto que se puede tocar", ha aclarado el concejal, que ha recordado que la consulta del grupo inversor chino pasaba por demolerla.

Ante una gran expectación mediática, Carmena ha informado de que "continúan las conversaciones con el grupo" y ha añadido que el Ayuntamiento "está muy interesado en que este grupo pueda construir el hotel en la Plaza de España".

Desde el área de Desarrollo Urbano Sostenible siguen trabajando con los "responsables técnicos, jurídicos y directivos del grupo". "Seguimos en conversaciones", ha asegurado el titular de Urbanismo. Tras la rueda de prensa han detallado que las conversaciones han sido telefónicas.

"Estamos en conversaciones permanentes. Nos vimos la semana pasada y nos seguiremos viendo", ha añadido José Manuel Calvo. Carmena, a su vez, ha contestado que "se han visto muchas posibilidades de cercanía dentro de las posibilidades legales".

El delegado ha recordado que los elementos a proteger están definidos no por el Ayuntamiento sino por la Comisión Local de Patrimonio, en la que participa el Consistorio y es presidida por la Comunidad, que tiene la mayoría. En su momento este organismo dictaminó que "era viable hacer la obra manteniendo los elementos protegidos", es decir, dio por inviable la propuesta de derribar la fachada.

José Manuel Calvo ha insistido en la "situación de normalidad" que se vive hablando con esta empresa, igual que se hace con otras. Esa normalidad se traduce en que el Ayuntamiento ya tiene listo el preceptivo estudio de detalle y tramitará la aprobación inicial cuando el grupo inversor les dé instrucciones para seguir adelante. El Ayuntamiento "lo hará encantado". Tras dicha aprobación las obras podrían empezar en dos o tres meses.

El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible ha añadido además que si las obras se ponen en marcha el Ayuntamiento se reserva la posibilidad de "garantizar avales" a Wanda para asegurar el desarrollo de los trabajos.