Roger Federer cayó eliminado contra pronóstico en los cuartos de final de Wimbledon ante el sudafricano Kevin Anderson. El partido se resolvió en el quinto set (2-6, 6-7 (5), 7-5, 6-4 y 13-11) tras más de cuatro horas de gran pelea e igualdad.

El partido se inició como se esperaba; dominio claro del suizo, que se llevó los dos primeros sets sin demasiados problemas. Pero en el tercer set la situación de partido cambió.

Anderson supo reponerse a la adversidad, no sólo del marcador, sino también de enfrentarse a todo un maestro como es Federer, y fue capaz de darle la vuelta al marcador e igualó el partido a dos sets.

El quinto, y definitivo set de desempate, estuvo marcado por la igualdad dominante entre ambos tenistas. Con una duración de hora y media en un sólo set, al tener que ganar por diferencia de dos juegos por ser un torneo Grand Slam, ninguno de los dos conseguía romper el saque de su rival. Hasta que, con 11 juegos iguales, Kevin Anderson consiguió ese break que le permitió llevarse ese quinto set y el partido, por un resultado final de 2-6, 6-7, 7-5, 6-4, 13-11.

Su rival en semifinales saldrá del duelo entre Milos Raonic y Thomas Berdych.