Los dos Alpine, contra el muro en el Gran Premio de Australia. Ese fue el triste final para Pierre Gasly y Esteban Ocon este fin de semana en la resalida del tramo final, que fue anulada debido al caso que se vivió en las primeras curvas del circuito.

La FIA investigó varios incidentes, el más sonado el de la sanción a Carlos Sainz por tocar a Fernando Alonso, y decidió no castigar a Gasly por 'cerrar' a su compañero de equipo contra el muro.

Un alivio para el galo, al borde de perderse una carrera por su licencia. Así se excusó la FIA: "Los comisarios escucharon al piloto del coche 10 (Gasly), al piloto del coche 31 (Ocon), a un representante del equipo y revisaron los datos del sistema de posicionamiento/marcha, el vídeo y las pruebas de vídeo en el coche y determinaron que fue un incidente de carrera en la primera vuelta".

"Ambos coches lo reconocieron y aceptaron como tal. Dadas las circunstancias, no tomamos más medidas", sentenció la organización, dejando sin castigo alguno a esa acción.

Gasly está en peligro y de momento podrá estar en Azerbaiyán. Al límite de la sanción, lo que supondría un gran inconveniente para Alpine.

La escudería francesa ha tenido un inicio horroroso de temporada. Sus dos pilotos sólo han sumado 8 puntos en tres carreras, uno más que Haas y dos más que Alfa Romeo. Son el sexto equipo muy lejos de la cabeza, a pesar de todos los mensajes optimistas que lanzaron en pretemporada asegurando que incluso podrían competir contra el Aston Martin de Fernando Alonso.