El coronavirus ha causado ya 2.000 víctimas y aunque parece que la crisis podría comenzar a disminuir, en McLaren no quieren correr riesgos y han decidido tomar acciones al respecto.

El equipo británico ha prohibido la entrada a todas sus instalaciones a cualquier empleado o visitante que haya estado en China durante las últimas dos semanas.

"El Grupo McLaren ha emitido una política que establece restricciones y condiciones que consideramos prudentes para salvaguardar la salud y el bienestar de nuestro personal, contratistas y clientes y proteger nuestras operaciones", han comunicado en McLaren. Razón por la que ahora que han comenzado los test de pretemporada, no han permitido entrar sus instalaciones a un periodista chino que había llegado a Barcelona volando desde Shangái.

"Entre estas medidas se encuentra la precaución de que a cualquier persona que haya viajado desde China en los últimas 14 días no se le permita entrar en un edificio o instalación operada por el Grupo McLaren hasta que pasen 14 días. Seguimos con atención y muy de cerca esta situación. Cambiaremos nuestra política según la evolución de las circunstancias, vamos a trabajar en esto junto a la Fórmula 1 y la FIA", finalizaba McLaren en el comunicado.

Pero estas medidas no solo se adaptan a sus instalaciones, sino que van a cambiar sus costumbres a la hora de volar a los Grandes Premios. La temporada comienza en Australia, y si hasta ahora siempre habían hecho escala en Hong Kong, ahora lo harán en Oriente Medio. En McLaren no quieren correr riesgos innecesarios.